Esquemática en el periodismo digital Hispano Americano*
Sebastián Moreno Rico
Adriana Rodríguez Gómez
Palabras clave: Esquemática. Información. Infografía. Infografista. Visualista. Iconicidad. Usabilidad.
En la actualidad, la infografía se ha convertido en una pieza fundamental de la esquemática para facilitar y agilizar la comprensión de los contenidos periodísticos, sobre todo en motion graphics. Pero a pesar de la capacidad informativa y el lugar privilegiado que ha ido ganando dentro de las opciones de información, el usuario promedio no conoce su verdadera significación ni dimensiones. No obstante las pocas nociones que se poseen sobre esquemática, las publicaciones conocen su real trascendencia, pues “los más importantes directores de periódicos la promueven y facilitan su desarrollo porque además están convencidos de su utilidad como un poderoso instrumento de la comunicación” (1).
De esta manera, se ha detectado la necesidad de ahondar en los aspectos concernientes a la infografía como recurso informativo en el marco del periodismo electrónico, teniendo en cuenta la notable evolución de los sistemas de comunicación durante los últimos años que a su vez, ha posibilitado la generación y utilización de nuevas herramientas.
Qué es infografía periodística en esquemática
La Real Academia Española define el término infografía como la “técnica de elaboración de imágenes mediante ordenador”; además, señala que la palabra corresponde a un acrónimo derivado de los términos informática y grafía.
Sin el ánimo de controvertir la definición que ofrece la Academia, es importante advertir que no es ése el sentido más apropiado para el concepto, al menos en lo que se refiere a lo desarrollado en este escrito dedicado a la esquematización en el periodismo digital. Por tanto, el primer paso dentro de este recorrido académico será el de precisar qué se entiende por infografía periodística, con la salvedad de que éste es un campo de aplicación derivado del concepto general de esquemática infográfica.
Pegie Stark, periodista y artista, miembro del Poynter Institute for Media Studies de St. Petersburg, Florida, dice que infografía periodística es "una combinación de palabras y elementos visuales que explican los acontecimientos descritos en el artículo y sitúan a la historia o a sus protagonistas en un contexto determinado" (2). Hasta este punto, la definición que presenta Stark combina algunos de los componentes de la pieza infográfica como son las palabras y los elementos visuales que contextualizan y explican.
Por su parte, el catedrático y doctor en ciencias de la información por la Universidad de Laguna, Carlos Abreu Sojo, en su texto “la infografía periodística” aborda con mayor claridad este concepto por lo que será el referente del que haremos uso en el desarrollo del tema propuesto: “Es un género periodístico iconográfico que permite anticipar, reconstruir o representar cómo ocurren aquellos hechos acontecimientos o fenómenos sobre los cuales generalmente no hay fotos, o éstas no resultan suficientes, explicándolos y/o describiéndolos a través de la integración de imágenes y palabras para una mejor comprensión del mensaje por parte del lector” (3).
Teniendo en cuenta el primer acercamiento que nos procura Abreu Sojo a la infografía de prensa y la incorporación de los nuevos elementos que provee la Web, como son el texto, los recursos visuales y auditivos y el componente de interactividad, estamos listos para entrar en la definición de infografía digital de que nos habla el catedrático y doctor en comunicación audiovisual, José Luis Valero Sancho en su texto, La infografía: técnicas, análisis y usos periodísticos.
Se puede decir que la infografía es una aportación informativa, elaborada en los productos comunicativos visuales o audiovisuales, realizada mediante elementos icónicos (estáticos o dinámicos), tipográficos y/o auditivos normalmente verbales, que permite o facilita la comprensión de los acontecimientos, acciones o cosas de actualidad o algunos de sus aspectos más significativos y acompaña o sustituye al texto informativo hablado o escrito (4).
De la lectura de la anterior concepción es posible inferir la trascendencia que da el autor al término información, que según él, es del que deriva la palabra infografía y no como aduce la Real Academia, de informática. A pesar de que el término infografía se derive de sólo dos palabras, es claro que, en la actualidad, la puesta en práctica de este concepto involucra necesariamente las tres expresiones: información, informática y grafía.
Así, se evidencia la necesidad de los medios de comunicación de adaptarse a la evolución tecnológica. Valero Sancho dice que “el desarrollo técnico y comunicativo en la prensa está cambiando, puesto que los lectores ahora aprenden a través de pantallas y el lector de periódicos también se está acostumbrando a la información visual e icónica de los sistemas audiovisuales” (5).
De tal forma que parte fundamental de esta transformación es la utilización de alternativas visuales que ofrezcan mejores condiciones a un lector que ha variado indefectiblemente su manera de percibir la información, una lectura lineal proveniente de la pantalla de un ordenador pierde funcionalidad ante los ojos de un usuario que conoce lo que la tecnología es capaz de proporcionar, de tal manera que “hoy es importante escribir y mostrar de la manera más visible e inteligible los acontecimientos, acciones y cosas que ocurren en la actualidad informativa en los periódicos” (6), los contenidos textuales extensos sin ninguna otra referencia son insuficientes a la hora de comunicar.

Ejemplo de infografía periodística
<http://infographicsnews.blogspot.com/2008/07/machines-souls-infographics-art.html>
Usabilidad y arquitectura de la información
Empezaremos por definir el término usabilidad. Pese a que esta expresión es comúnmente utilizada entre los profesionales de la computación, en realidad es aplicable a cualquier sistema. “Podemos definir la usabilidad como la medida en la cual un producto puede ser usado por usuarios específicos para conseguir objetivos específicos con efectividad, eficiencia y satisfacción en un contexto de uso especificado” (7).
Poniéndolo en términos de contenidos informativos en la Internet podríamos relacionar este concepto con la facilidad del usuario para acceder a la información que le interesa, o como lo define de forma acertada Guillermo Franco, en su texto Cómo escribir para la Web, “es la palabra que describe la facilidad de uso” (8) si el usuario de un periódico digital no logra encontrar los contenidos no se informa o simplemente, si la página es difícil de explorar, basta un “clic” para abandonarla.
El otro concepto que abordaremos en esta sección, está estrechamente relacionado con la usabilidad: la arquitectura de la información. Si bien la usabilidad tiene una mayor relación con el producto en su etapa final, donde el consumidor entra a hacer “uso” de él, la arquitectura de la información tiene que ver más con la etapa de la planeación; pues es en ese momento en donde se estructura la información, de tal forma que se pueda llegar a un nivel aceptable de usabilidad.
El arquitecto, diseñador y especialista en información comprensible Richard Saul Wurman definió la arquitectura de la información en el año de 1975 como "el estudio de la organización de la información con el objetivo de permitir al usuario encontrar su vía de navegación hacia el conocimiento y la comprensión de la información" (9).
Los conceptos de ‘visualizar’ y de ‘didáctica gráfica’
El primer concepto que debemos mencionar a la luz de los razonamientos de Costa es el de visualizar, que según este autor se trata de “hacer visibles y comprensibles al ser humano aspectos y fenómenos de la realidad que no son accesibles al ojo, y muchos de ellos ni siquiera son de naturaleza visual. (…) Si lo que llamamos ‘la realidad’ es lo que percibimos, se comprende que ‘visualizar’ es un medio de ampliar el mundo de lo perceptible, es decir, de generar y transmitir conocimientos que en principio no están a nuestro alcance” (10).
De la anterior afirmación podemos desprender que el infografista es en este caso el que nos ayuda a comprender visualmente los contenidos informativos que a diario se producen pero que por su complejidad además de otros factores asociados directamente al receptor de la información, son incomprensibles de manera inmediata por si mismos.
En consecuencia, el esquematista debe ser capaz de analizar la información, descomponerla y volver a articularla de tal manera que resulte comprensible casi a primera vista. Es aquí precisamente donde podemos ligar las funciones del visualista, el experto en usabilidad y el arquitecto de la información, pues el fin último de todos estos profesionales es el de ayudar a comprender contenidos de cualquier índole.
Así mismo, debemos entender que si bien el diseñador, por la naturaleza de su oficio, debe cumplir con una función estética, más que un artista es un comunicador, por ende, un profesional que se encarga de difundir de manera eficaz los mensajes valiéndose principalmente de recursos visuales y adicionando, en el caso de la infografía digital, los textuales y auditivos, de esta forma lo expresa Joan Costa cuando dice que: “Desde ahora, el diseñador deberá ser, sobre todo, hombre de comunicación; deberá operar en todo momento “soluciones” en forma de verdadera síntesis expresivas; desarrollar un proceso de síntesis mentales y técnicas, de estrategias comunicativas, que desembocarán en forma de “respuesta” a los requerimientos de la empresa, del producto o del mensaje y de sus funciones, así como de las demandas y condicionantes socioculturales de sus destinatarios” (11).
En cuanto a la esquemática, el autor la define como la “ciencia de los esquemas” así que para abordar esta sección, en principio, nos remitiremos al concepto de esquema.
Como primera aproximación haremos referencia a la definición de esquema que nos ofrece la Real Academia Española: “Representación gráfica o simbólica de cosas materiales o inmateriales” (12). Estamos de acuerdo con esta definición, en tanto que un esquema es evidentemente una representación gráfica, en concordancia con lo tratado en este escrito.
Igualmente, nos permitiremos citar otra sencilla noción de esquema que también se ajusta a lo que hemos venido manifestando, especialmente en lo que se refiere a didáctica: “es la representación simplificada de una realidad compleja” (13).
También podríamos decir que está íntimamente ligada a la visualización, pues mediante el proceso de esquematización el visualista puede lograr su meta final de hacer comprensibles los contenidos complejos. En consecuencia el proceso de esquematización implica el de visualización, así lo ratifica Costa cuando dice que, sobre la teoría de la esquematización se edifica precisamente la visualización de informaciones.
Joan Costa afirma que la esquemática es “la parte de la comunicación visual que estudia el lenguaje gráfico de los esquemas como mensajes, y la esquematización como procedimiento para la visualización de conocimientos que no son visibles en la realidad. El objeto de todas las variables de la esquematización es la transmisión de informaciones” (14).
Por otra parte define el esquema como “una configuración o una estructura de elementos interrelacionados los unos con los otros y que constituyen en conjunto una unidad perceptiva, una forma total portadora de información”.
En síntesis, podemos decir que la información gráfica producto de la esquematización se opone a la imagen como objeto artístico, teniendo en cuenta que en el arte, la interpretación del receptor es totalmente subjetiva. Por el contrario, el objetivo de la visualización mediante esquemas es el de presentar la información de tal manera que no exista ningún tipo de ambigüedad a la hora de interpretar, es decir, que su mensaje sea único para todos los receptores; es en este aspecto que radica uno de los principales retos del visualista, comunicador, diseñador o infografista.
Iconicidad versus esquematización
Costa nos dice que la iconicidad es un tipo de sistema de medición que se aplica a las representaciones visuales, entre las que podemos situar los esquemas dadas sus características. Así, en principio: “la iconicidad es el grado de semejanza entre un signo (en el sentido semiótico) y aquello que este signo representa (su referente)” (15).
En el año de 1970, el sociólogo parisino, Abraham Moles, planteó un sistema de medición que serviría para clasificar las imágenes según su nivel de iconicidad o de abstracción, este modelo teórico fue denominado por él mismo “escala de iconicidad decreciente”. En este orden de ideas, podemos distinguir dos extremos opuestos en la mencionada escala: “la máxima representación posible de lo real visible (iconicidad máxima) y su mayor abstracción (iconicidad nula)” (16). El aporte que hace Moles con este elemento teórico, es el de analizar el elemento icónico a partir de su contribución informativa.
Por su parte, Robert Estivals, Doctor en Historia y Letras, investigador y profesor de la Universidad de Burdeos, partiendo del modelo creado por Moles, también analizó el elemento icónico pero sobre el eje de la abstracción, es decir que su herramienta resulta inversa a la planteada inicialmente por Moles.
Costa dice al respecto del modelo de Estivals que se analiza desde el ángulo de la “esquematización creciente”, entendiendo que la esquematización consiste en “una acción de reducción progresiva de la complejidad de los fenómenos, y recíprocamente, un aumento progresivo de la información visual o de la inteligibilidad del mensaje —y de la inteligibilidad del fenómeno mismo a través de su esquema—, (La inteligibilidad de un esquema ‘es’, pues, la inteligibilidad del fenómeno)” (17).
La idea de este tipo de representación es mostrar el objeto o fenómeno no sólo en su forma real sino estructural o de relaciones con el exterior, es decir, mostrando todos los elementos que hacen comprensible la información. Este nuevo lenguaje visual, aunque se valga de pequeños textos, es predominantemente gráfico.
De lo anteriormente expuesto podríamos deducir que la infografía es el resultado del ejercicio de esquematización digital de una información inicialmente abstracta o que no es visual por si misma, pero que gracias a la articulación de distintos elementos formales (y en el caso de la infografía digital, el audio y el video), se convierte en una información de fácil interpretación para un público no necesariamente especializado.

Escala de esquematización Icónica versus Escala de Iconicidad Decreciente
Aplicación de conceptos
Con la intención de aproximar los conceptos aquí precisados, al ejercicio real, se realizó una exploración en tres importantes medios electrónicos: El Tiempo.com, El País.com y Clarín.com. El instrumento de investigación empleado fue la entrevista a distintos profesionales que a diario estudian y desarrollan infografías, por razones metodológicas en este aparte se hará mención únicamente a las conclusiones a que se llegó a partir de los testimonios y su relación con el planteamiento conceptual desarrollado.
Como primera medida, se percibieron desacuerdos e imprecisiones en el momento de hablar de infografía debido a que es un género periodístico en pleno desarrollo. Los infografistas de los distintos medios electrónicos están descubriendo todas las posibilidades que este recurso conlleva a través de un aprendizaje continuo basado en sus propias experiencias.
Estas diferentes formas de presentar los esquemas infográficos, como lo menciona Javier Zarracina del Boston Globe, en su presentación para la SND del 2007, se convierten en tendencias que ayudan a generar la identidad de un medio periodístico, pues no sólo son los colores distintivos de cada medio o su diagramación las que identifican el diario digital sino la manera como se cuentan las historias.

Infografía digital publicado por El Tiempo.com
El amor a la infografía también entra por los ojos
La frecuencia de lectura de los esquemas infográfícos dentro de cada publicación influye de manera determinante sobre la relevancia otorgada por cada medio. Pero, en realidad, ¿las infografías tienen bajos porcentajes de lectura? En el caso colombiano aparentemente sí, aunque sus causas pueden ser muy diversas: publicidad deficiente, una ubicación remota, sumado a lo que califica Juan José Ramírez, editor del Tiempo.com, como la falta de cultura digital de los usuarios que no están habituados a informarse a través de este tipo de instrumentos.
En contraste con lo que ocurre en Colombia, diversos estudios aplicados al comportamiento del usuario en Internet entre los que se destacan los realizados por la Universidad de Lund, señalan que el contenido gráfico tiene mayor relevancia para los lectores. Así por ejemplo, Constanze Wartenberg y Kenneth Holmqvist registran en un documento que data del 2005 su investigación sobre los hábitos de lectura de los usuarios en donde concluyen que dentro de un diario impreso dividido en distintas secciones, el área de interés revisada por los usuarios en primer lugar y el mayor porcentaje de tiempo dedicado a en relación a la lectura total del periódico es el área de información visual. El segundo vistazo lo dieron los usuarios al área de publicidad pero usaron solo un 5% del tiempo total de lectura en ella, por su parte el tercer vistazo lo ocupó el área de información visual combinada con texto utilizando en este fragmento el 30% del tiempo total ocupado en la lectura, fracción equivalente al lapso usado para la información visual que se relaciona en el primer lugar (18).
Con esto queremos concluir que la combinación de imágenes y texto aumentan ostensiblemente el tiempo de lectura por lo que los esquemas representan un mayor interés, comprensión y memoria de la información para los lectores.

Ejemplo de las áreas de interés revisadas por los usuarios durante la investigación realizada por Wartenberg y Homqvist
<http://www.lucs.lu.se/LUCS/126/LUCS.126.pdf>
* Extracto de la investigación: Moreno Rico, S./Rodríguez Gómez, A. Infografía digital en el periodismo hispanoamericano, Fundación Universitaria Los Libertadores, colec. Diseño gráfico y comunicación social-periodismo, Bogotá 2009.
1. VALERO, J.L. La infografía: técnicas análisis y usos periodísticos, Universidad Autónoma de Barcelona 2001, p. 91.
2. STARK, P. en LETURIA, E. “¿Qué es infografía?” Revista Latina de Comunicación Social, 4, Universidad de La Laguna 1998: <http://www.ull.es/publicaciones/latina/z8/r4el.htm> (visto el 25.09.2008).
3. ABREU SOJO, C. La infografía periodística, Fondo Editorial de Humanidades y Educación, s.l. 2000, p. 61.
4. VALERO J.L. op. cit. p. 201.
5. Ibidem. p. 18.
6. Ibidem. p. 15.
7. <http://www.sidar.org> “¿Qué es la Usabilidad?” (visto el 05.03.2009).
8. FRANCO, G. Cómo escribir para la Web, Centro Knight para Periodismo en las Américas, Universidad de Texas, Austin s.d. p. 45.
9. “Richard Saul Wurman y la arquitectura de la información”, <http://sociologiac.net> (visto el 05.03.2009).
10. COSTA, J. La esquemática, visualizar la información, Paidós, Barcelona 1998, p. 14.
11. COSTA, J. Imagen Global, Enciclopedia del Diseño CEAC, Barcelona 1994, p. 11.
12. Real Academia Española, Diccionario de la Lengua Española, vigésima segunda edición <http://www.rae.es/rae.html> (visto el 17.04.2009).
13. “Confección de un esquema” <http://www.claseshistoria.com/general/confeccionesquema.htm> (visto el 17.10.2009).
14. COSTA. J. La esquemática, op. cit., p. 112.
15. Ibidem. p. 103.
16. Ibidem. p. 143.
17. Ibidem. p. 107.
18. WARTENBERG Constanze y HOLMQVIST Kenneth, “Daily newspaper layout –designers’ predictions of readers' visual behaviour a case study” Lund University Cognitive Studies, Lund, Suiza, 2005, p. 4.
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